OLVIDAR EL PASADO
¿Te acuerdas de hace unos cuantos años cuando el mundo online comenzaba a aparecer y todo el mundo usaba animaciones, gifs y cosas así para su tienda online? Eran cosas que llamaban la atención, básicamente porque todos veníamos de un mundo de papel, donde todo era estático y aburrido, y de repente el ordenador nos daba la posibilidad de ver imágenes en movimiento. Algo que nos encantaba.
Y así, la mayoría de los ecommerce (y webs en general) tenían esta pista:
Pero a mediados de 2016 estas cosas ya no es que no funcionen, es que hace que sangren los ojos, amén de generar mucha desconfianza y de dar un aspecto cutre.
¿Qué cosas desfasadas deberías empezar a olvidar para siempre? Aquí va una pequeña lista:
Animaciones en flash
Adobe Flash es una plataforma de desarrollo para crear juegos y animaciones web. Aunque fue muy popular hace unos años (no había sitio web sin su presentación en flash), ahora es uno de los elementos que hay que evitar a toda costa.
Los sitios en Flash tardan mucho en cargar, son incompatibles con los teléfonos y tienen requisitos de sistema específicos… en resumen, son una muestra innecesaria de creatividad que ahuyenta a los usuarios. Además, a Google no le gusta, así que usar Flash es tirar piedras contra el tejado de la optimización para buscadores.
Imágenes de archivo poco realistas
Las imágenes de archivo son útiles para presentar ideas, pero tienen un problema: hay que saber escogerlas. Si no, acabas usando fotos cutres de archivo, que se ve a la legua que has sacado de internet.
Internet está lleno de páginas repletas de trabajadores sonrientes y comerciales casi etéreos respondiendo al teléfono con los auriculares puestos… un estilo anticuado y artificial que, de nuevo, da aspecto cutre y poco profesional a tu negocio.
El objetivo de las imágenes es transmitir credibilidad, pero con el material de archivo se consigue justo lo contrario. Se ha abusado tanto de este recurso, que los usuarios ya se conocen hasta las caras. Y cada vez que se topan con el típico hombre de negocios vestido de traje, lo rechazan inmediatamente y se hacen una idea negativa de tu sitio web. ¿Lo mejor? Hacer tus propias fotos (si sabes o puedes contratar un profesional que te las haga) o recurre a la compra de imágenes de mayor calidad y más exclusivas.
Pops up
Sí, lo sabemos, todos al final los acabamos usando aunque sabemos que son un coñazo. Son el elemento más frustrante de un sitio web. Da igual si son para registrar un correo, suscribirse al boletín o anunciar una promoción: ¡son exasperantes y disipan el interés del usuario!
Los clientes llegan a tu sitio en busca de información de productos y los pop-ups dificultan mucho la tarea. Otra desventaja: son difíciles de cerrar desde el teléfono. En el fondo sabemos que siguen siendo útiles para muchas cosas, pero no sería la primera vez que un cliente deja de comprar en un sitio por la molestia de una ventana emergente.
Si puedes evitarlas, hazlo.
Carrusel de imágenes
Los carruseles llegaron a arrasar, pero hoy los diseñadores los ven con otros ojos. Normalmente, solo tienes unos segundos para captar el interés del visitante, así que si dejas algo importante para la tercera imagen del carrusel… ese cliente potencial se lo perderá.
Atrae la atención del visitante con una única imagen perfecta y añade contenido adecuado para explicar tu mensaje.
Fuentes tipográficas pasadas de moda
La tipografía también es cuestión de modas. Así que si no quieres que tu sitio parezca del siglo pasado, aléjate de fuentes como Comic Sans, Times New Roman y las cursivas. El efecto de bisel y relieve (una opción de Photoshop para darle un aspecto tridimensional al texto) también está en la lista de los prohibidos.
Apuesta por los diseños planos, los elementos vectoriales y una interfaz limpia. ¡Y no uses más de tres fuentes para todo tu sitio web!
Diseños que intentan imitar la realidad (esqueumórfico)
Este tipo de diseño usa elementos que se basan en productos reales. Por ejemplo, una librería online que parece una estantería de una tienda clásica: eso se llama un diseño esqueumórfico. Este estilo popularizado por iPhone que ya está desfasado. Ahora se imponen las tendencias planas y minimalistas. Ya te deshiciste de los sombreados y los gradientes… ahora toca olvidarse de este estilo y centrarte en otros.
Fuente: PrestaShop .com
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COSAS OBSOLETAS DE LAS QUE TE TIENES QUE OLVIDAR (parte II)
Hace tiempo escribimos esta entrada, en la que hacíamos un pequeño recopilatorio de algunas de las cosas obsoletas que ya no deberías utilizar en tu ecommerce. Cosas propias de otra época, en la que sí tenían sentido, pero que se han visto relegadas a un papel desfasado, substituible por herramientas o tácticas más modernas y adecuadas para ello, y cuyo mantenimiento no hace otra cosa que ofrecer una imagen anticuada de cara al público.
En el pequeño listado que hicimos, de 6 tips que deberías olvidar para tu tienda online, nos centrábamos en “complementos de diseño”, tales como las animaciones en flash (huelen a rancio desde lejos), las imágenes de archivo poco realistas , como las típicas de shutter que mezclan imágenes de personas recortadas sobre un fondo blanco y diseños 3D de muy baja calidad (abuelil a más no poder), por no hablar de los clásicos pop-ups, que aparecen todo el rato, sin venir a cuento, con textos en colores estridentes y animaciones gif de muy baja calidad (es tan antiguo como los neones, pero sin el toque vintage).
También tratamos los clásicos carruseles para todo (los carruseles tienen una finalidad, pero no sirven para ir informando “por fascículos” al usuario), sin olvidar que es importante evitar fuentes tipográficas desfasadas (sí, eso va por la comic sans que, inexplicablemente, en pleno 2017, todavía hay gente que la usa), o estilos de diseño añejos, tales como el diseño esqueumórfico, que intenta imitar la realidad (¿lo recuerdas? Era el estilo que utilizaba apple al principio de la era iPhone, allá por el 2010). SI bien fue una entrada divertida y que nos arrojaba un poco de luz sobre el tema, también es cierto que solo lo rozaba superficialmente por encima, por lo que nos hemos decidido a completar la información y ampliarlo a más aspectos relacionados con una tienda online.
Como ya sabemos de qué va el tema, y lo que queremos es ir directamente al grano, nos dejaremos de entradillas y…¡Vamos al lío!
Columnas laterales
Las columnas laterales son las barras laterales que se utilizan para mostrar información adicional al contenido principal de la página web, generalmente se utilizan para el menú, y, como a mucha gente le parece que queda demasiado sitio libre, lo llenan de banners y anuncios de toda clase, ya sean propios o de terceros (Adwords). Y, antes de que intentes salir en su defensa, ya te avisamos de que este tipo de columnas son tan antiguas y desfasadas que las van a poner en los libros de cultura clásica junta a la dórica, jónica y corintia.
Ya no solo es que ahora el diseño se centra en el minimalismo, sino que es que hoy día eso es lo menos usable a nivel responsive que te puedas echar a la cara. ¿Cómo vas a adaptar eso a una versión móvil? ¿Los usuarios van a ver primero la columna y luego el contenido de la tienda? ¿Vas a dejar mini para que tengan que hacer zoom? Simplemente, es incompatible con una web actual. No sirve y por eso está obsoleto.
Si da la casualidad de que tú tienes una de estas, lo primero que tienes que hacer es ponerte a revisar el contenido de tu web y decidir que es importante y que no, y si lo que hay en esa columna es susceptible de ser situado en mejores sitios. Lo que no, es mejor ubicarlo en páginas dedicadas, y lo imprescindible (búsqueda, cesta, newsletter, categorías…) mejor ponlo en el encabezado de tu página. Además del tema de la usabilidad, las columnas laterales distraen a la gente y disipan la atención del contenido principal, ya que la gente se ha ido haciendo al estilo flat y que haya una columna fija, de la que no se pueden librar, les estorba.
Sin embargo, aún habiendo dicho todo esto, es posible que, por características de tu tipo de ecommerce, necesites contar, en algún momento del proceso de compra/pago, que haya una columna (como en todo, siempre hay excepciones para las normas, por ejemplo, quizá cuentas con un comparador de productos muy avanzado que te exige un tipo de columna de este tipo para poder interaccionar con los resultados de búsqueda), en ese caso, nuestro consejo es que su aparición se limite a ese proceso en sí y que nunca, jamás, aparezca directamente en la Home de la tienda.
Landing Page
Las landing page, o pantallas smash, son un tipo de página, que podríamos decir que es de introducción, y que se muestra antes de que la página se haya cargado por completo. Suele utilizarse para iniciar sesión antes de entrar en el sitio web, para seleccionar previamente el idioma de la página o como soporte publicitario, para anunciar una promoción antes de que el usuario navegue por nuestra tienda.
Hace unos años ningún negocio o marca tenía una web realmente molona si no contaba con una de ellas (y había que ponerle una cuenta atrás para algo, que eso siempre daba morbo al asunto), pero hoy día la cosa ha cambiado. En resumidas cuentas, la landing page es, independientemente de su finalidad, un clic adicional que el usuario tiene que realizar para alcanzar nuestra web, algo ya obsoleto que aparta a tus clientes de entrar y realizar compras en tu tienda. Simplemente, ya no tiene sentido utilizarlo, pudiendo tener esa misma información en la página principal de nuestra tienda, sin limitar al cliente, ya que si no le interesa el tema puede seguir navegando como si nada.
Presentaciones Coverflow
¡Ay Apple! ¡Cuánto has aportado y cuánto has contaminado en el mundo del diseño! ¿Por qué decimos esto? Pues porque introdujeron formas de diseñar y presentar las cosas que nunca antes se habían visto, pero que la gente comenzó a copiar y a usar absolutamente para todo hasta llegar el punto de que se volvía cansino por pura repetición. ¿Recuerdas lo que hablábamos más arriba con respecto el diseño esqueumórfico? Pues esto es lo mismo. Las presentaciones coverflow se pusieron de moda gracias al iPhone, donde se ven los productos unos al lado del otro, en un carrusel sobre un fondo negro, y que al pasarlos da una sensación de “movilidad” entre ellos, y esto, es antiguo, por mucho que haya gente que aún piense que es “dinámico”.
La presentación de productos en coverflow es, junto con la splash screen y la introducción con flash, otro aspecto obsoleto de una tienda online, y es algo que te recomendamos evitar totalmente. Esta función no permite una buena visualización general de los productos, ralentiza el funcionamiento de tu tienda y no ayuda a mejorar tu SEO. Lo mejor es que te olvides de ella y te centres en una presentación clásica del producto, con un diseño de cuatro columnas (para presentar una visión completa) o un menú desplegable si tienes una gran cantidad de categorías entre tus productos.
Texto de bienvenida
Gracias a Dios, ya cada vez se ve menos, pero en muchas tiendas (sobre todo de productos artesanos) se estila mucho el poner un texto de bienvenida en la parte superior de la Home, justo bajo el menú, donde iría un slider de promociones, y esto, en el mundo web, es el equivalente a poner “descuento para la tercera edad” en la entrada de una discoteca. Es rancio, antiguo, y, sinceramente, algo muy cutre que da una imagen de no tener ni idea del mundo digital.
Ese texto de bienvenida es un mensaje innecesario que ocupa mucho espacio y que no viene a cuento, pues el usuario no espera ese tipo de mensaje ahí, ya que no está yendo físicamente a ninguna parte, es decir, no es que tú “le recibas” en tu tienda, simplemente está navegando y ha llegado ahí, mientras está haciendo otra serie de cosas. No está físicamente en ningún sitio al que tú puedas darle la bienvenida. El usuario no va a prestarle atención de hecho, ya que, como dijimos antes, está habituado a navegar en páginas y tiendas online, por lo que simplemente bajará el scroll buscando lo que le ha llevado ahí.
Nuestro consejo es que, en lugar de esta ñoñada de mensaje de bienvenida, puedes aprovechar el espacio y colocar productos destacados, call to actions u ofertas especiales en un slider, para aprovechar el espacio para más de una promoción y darle dinamismo a la Home. Así estarás usando ese espacio de una forma eficiente, que es lo que interesa tanto al usuario que entra en la tienda (y que puede llegar a comprar un artículo ahí promocionado) como a ti, ya que optimizas tus resultados de ventas.
La palabra GRATIS
Existe la creencia en internet (bueno, y en general en la vida) de que los consumidores reaccionan rápida y favorablemente a ofertas que incluyan el término gratis. Que es como un comodín que, en cuanto lo pones, la gente va a ir corriendo a ti. Sin embargo, es habitual que al ver este tipo de ofertas, los clientes miren más a la descripción de la oferta que al propio producto en sí. Los “genios del marketing” que recurren al gratis van a la par del que dice “bueno, bonito y barato” en un mercadillo.
Quédate con esto: La palabra GRATIS es internet es un sinónimo de “estafa”, por lo que deberías evitar el uso de términos equivalentes a “ofertas gratis”, ya que pueden dar la sensación de ser una trampa o un fraude, y en su lugar, promueve ofertas y/o descuentos especiales. Incluye la palabra gratis solamente cuando se refiera a formas de entrega, ya que ahí sí que resulta un valor positivo, ya que muchos clientes convertirán solamente por ello (eso sí, más vale que sea cierto que es “gratis” de verdad, y no un “0€ por el servicio y X€ por las tasas”, ya que la gente, te recordamos, tiene sus tablas en él esto de navegar por internet y tonta no es).
Registro
No hay nada que espante más clientes que un proceso de registro completo justo antes del pago. En los albores del ecommerce, en un intento de aparentar una mayor seguridad, se hacían extensos procesos de pago, de varias páginas, para que el cliente percibiera una “seguridad” latente, al entender que sí pedían tantos datos era para asegurarse de que todo llegaba correctamente. Pero esos tiempos han pasado. La gente no está para perder el tiempo rellenando formularios extensos pidiendo datos que, realmente, no son de ninguna utilidad para nuestra tienda, y que solo desprenden desconfianza, al no quedar claro para qué se necesita tanto dato.
Así que, ¿por qué no permites a tus clientes realizar el proceso de compra sin necesidad de registrarse? Tienes que tener en cuenta que tienes que asfaltar todo lo posible el camino desde la compra al pago final para que el cliente no se pierda, ni se distraiga ni se aburra antes de finalizarlo.
Ofrece a los usuarios de tu tienda online la posibilidad de crear una cuenta al realizar un pedido, pero no lo conviertas en algo imprescindible a la hora de finalizar la compra. De hecho, tienes que vendérselo bien para que le merezca la pena hacerse la cuenta: “Hazte una cuenta y descubre nuestros descuentos solo para socios” “Hazte una cuenta y estate al día de todas las novedades”. Es una muy buena forma de facilitar la tarea a tus usuarios y de convertir más ventas.
Mucho texto
Si tienes en cuenta que la mayor parte de tu tráfico web va a entrar por buscadores o enlaces de terceros (redes sociales), ya puedes suponer que la gente que acuda a tu ecommerce no te va a ir buscando a ti, sino a tus productos. Les va a dar bastante igual toda tu filosofía de venta y la historia de tu empresa (a no ser que presentes todo eso como un valor de marca, pero esa es otra historia que no vamos a analizar ahora). Si entran y se encuentran textos enormes en la Home, textos enormes en las categorías y textos aún más largos en las fichas de producto, se van a abrumar. Les va a dar pereza ponerse a discernir qué es importante de todo eso, y lo más seguro es que muchos de ellos se vayan a otra tienda donde todo sea más obvio y sencillo.
Esto es un fallo importante, tienes que tener en cuenta que tu tienda online cuenta con aproximadamente 3 segundos para captar la atención de un visitante. Por ello, es importante simplificar el diseño de tu tienda, así como la carga de texto que contiene, para que tus clientes puedan encontrar fácilmente lo que buscan: primero sedúcelos con una buena foto para, a continuación, dirigirlos hacía las descripciones y las fichas de productos dentro de las páginas de tu tienda.
Pero, cuidado, no te calientes y que esto te lleve al error de pensar que es mejor no incluir contenido en texto, o reducirlo tanto que apenas se vea más que lo imprescindible. Esto sería una cagada aún mayor, ya que las palabras siguen siendo fundamentales para el posicionamiento en buscadores como Google, y si reduces demasiado el texto en el contenido general de la tienda, los buscadores van a acabar ignorando tu presencia.
La clave reside en estructurar el contenido (espacio, bullets, presentación de ficha de producto en, etc.) y dar todo el protagonismo a las imágenes, ya que son las que confirman al cliente que está en la página adecuada, ya que la vista se va directamente a la imagen antes que al texto. Combina imágenes con textos breves, y trata de encontrar el equilibrio entre buen contenido, espacios en blanco, para darle aire al conjunto del diseño, e imágenes.
Un consejo: Antes de que un entendido en SEO venga a arrearnos por este punto, si bien es cierto que el SEO mejora con el contenido en texto de un sitio web (sobre todo si es dinámico y se actualiza constantemente), también lo es que la tienda no es el sitio más adecuado para ello, ya que lo único que se consigue es espantar a los usuarios. Lo mejor para combinar ambos puntos es crearnos un blog de la tienda, y ahí sí podremos explayarnos a gusto, de hecho, cuanto más mejor, ofreciendo contenido original en constante actualización.
Hay más cosas obsoletas que deberías olvidar y que queremos recordarte que olvides, podríamos hacer una entrada de más de 50 cosas que merece la pena en esforzarse en eliminar de nuestros recuerdos, pero tampoco queremos abrumarte con todos los datos a la vez, por lo que, por hoy, dejamos esta entrada “aparcada” hasta una nueva ocasión. Seguro que con estas 7 cosas ya tienes una buena lista de tips a revisar en tu tienda online e ideas para optimizar tanto el diseño como la manera de organizar y presentar los productos. Lo más importante es que, como te decimos antes, “allanes” el camino al usuario, lo máximo posible, para que pase a convertirse en un cliente.
¿Tienes dos o más elementos de estos en tu tienda online? Pues va siendo hora de renovar el diseño, ¿no te parece? Péganos un toque y te daremos presupuesto (será mucho menos de lo que te esperas, eso seguro) 🙂
¡Salud y buen ecommerce!
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Gina dice
Eso de estar o no de moda, en muchas ocasiones es desde el lente con que se mire. Algunos elementos que mencionas estoy de acuerdo como el flash que paso de moda pero por que además los navegadores lo restringieron. Y por que surgió un equivalente que permite la animación html5. Vivimos en un mundo en donde en realidad ya nada pasa de moda, vienen tecnologías nuevas con las que puedes hacer lo antiguo nuevo.